Si queremos la compañía de un animal, tenemos dos opciones. Una es ir a una tienda de mascotas, ver los perros y gatos que se encuentran detrás de una vitrina, elegir uno y pagar por él para llevarlo a casa. Otra, visitar un albergue de animales en adopción, convivir con ellos, ver con cuál nos identificamos mejor, iniciar el proceso de adopción e incorporar un nuevo miembro a nuestra familia. Según los expertos, la segunda opción reporta beneficios psicológicos mucho mayores.
Adoptar un animal es una excelente forma de sensibilizar a los pequeños. Foto: Thinkstock
Afortunadamente la adopción de animales se encuentra cada vez más difundida entre nuestra sociedad. Cada vez más, familias, parejas e individuos se percatan de que adoptar una mascota es una mejor alternativa que comprarla.
Además de los beneficios obvios para la mascota que encuentra un hogar, ¿cuáles son las ventajas para una familia? “Para los niños no existe diferencia alguna entre sus mascotas y sus hermanitos. Para ellos ambos son vidas. Cuando compramos un animal les enseñamos que las cosas en la vida se obtienen con dinero, incluso la vida. Si queremos que un niño sea una persona sencilla y responsable, la mejor opción es adoptar”, comenta la doctora Claudia Edwards, veterinaria y psicóloga de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Asimismo, adoptar un animal es una excelente forma de sensibilizarnos y sensibilizar a los pequeños. “Cuando vas con tus hijos a un albergue, a que vean a los perros que no tienen hogar, se dan cuenta de la realidad de estos seres vivos: más allá de animales que están detrás de un vidrio como mercancías verán perros con cicatrices, o que quizá les falte una patita. Eso despertará en ellos un sentimiento muy humano, una necesidad de protección”, agrega la especialista.
Aprender a ser responsable
Pero no hay que irnos con la finta; que no nos cueste no quiere decir que no implique una enorme responsabilidad. Al contrario: “La intención no es suficiente. Para cuidar una mascota es preciso tener tiempo, dinero y ganas”, explica la doctora. En este sentido las protectoras de animales juegan un papel muy importante llevando a cabo un proceso de concientización. Para poder adoptar se debe pasar por una fase de adopción responsable, que consiste en llevar al animal una o dos semanas a casa, ver si se adapta a nuestro ritmo de vida y a las situaciones del entorno.
Cada vez más, familias, parejas e individuos se percatan de que adoptar una mascota es una mejor alternativa que comprarla. Foto: Thinkstock
Las posibilidades de que el perro adoptado regrese a la calle son muy bajas. “La satisfacción al cuidar un animalito y rehabilitarlo, encariñarte con él, es enorme”, agrega Claudia. Al adoptar todos obtienen calidad de vida, todos salen ganando.
¿Lazos más estrechos?
Según la especialista, 80 por ciento de la gente que compra un animal lo hace por impulso, “porque le parece que está bonito”. Sin embargo, conforme pasa el tiempo, el animal crece y comienza a hacer destrozos, la magia se va desvaneciendo. “Quienes adoptan un animal tienen un nivel de conciencia más elevado. Renuncian al estatus social que proporciona una raza por algo que tiene mucho más valor”.
¿Cómo saber si estoy listo?
Adoptar despierta en nosotros un sentimiento muy humano, una necesidad de protección. Foto: Thinkstock
Realiza un examen de conciencia para saber qué vas a hacer si el perro destruye algo muy valioso en tu casa. Pregúntate, ¿qué pasaría si destruye el sillón, unos zapatos, unas chanclas, la defensa del auto?
¿Qué va a pasar cuando tengas vacaciones? ¿Vas a pagar pensión, a quién se lo vas a dejar?
Cuidado veterinario. ¿Qué va a pasar si el perro necesita una vacuna de 100 o 500 pesos, una cirugía de 10 mil pesos?
Rutina diaria. ¿Cuánto tiempo vas a tener para dedicarle? Toma en cuenta que, si es perro, necesitará mucha más atención que un gato.
Nutrición. Tendrás que alimentarlo con croquetas especiales, y no con desperdicios de comida.
¿Estás dispuesto a esterilizarlo?
Si no puedes adoptar, existen otras opciones. Una de ellas es la adopción virtual, mediante la cual puedes apoyar con comida o dinero para algún animal. También existe la alternativa de sacarlos a pasear.
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